La finca llama la atención por su excelente estado en cuanto a cuidados de labor, limpieza del monte, caminos, vallados, construcciones e infraestructuras en general. No está afectada por ningún tipo de protección.
Se trata de una grandísima finca con doble aprovechamiento, agrícola con muy buenas tierras de labor secano, cinegético tanto para la caza menor como para la mayor.
Las tierras son de buena calidad y el monte es un monte suave cuya vegetación es diversa estando compuesta por encinas, carrascas, sabinas, retama y jara.
Explotación Agraria: En la actualidad se encuentra sembrada de trigo blando, cebada y avena con sus correspondientes zonas de barbecho tradicional.
Explotación cinegética: Tradicionalmente es una de las mejoras zonas de caza menor del país contando con especies como la perdiz roja, conejo, tórtola, liebre y paloma torcaz. En cuanto a mayor cuenta con buenos ejemplares de ciervo y jabalí. Empiezan a verse algunos ejemplares de corzo. Al igual que la explotación agrícola, la explotación cinegética está perfectamente cuidada contando con comederos y bebederos en toda la finca, 8 charcas, torretas de vigilancia y esperas. Cuenta con un cercón para jabalí de 170 ha.